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Arualthings

Your heart, My heart cap 7

¿Por qué me sucedían esas cosas? ¿Qué estaba sucediendo en realidad? ¿Quién era Yunho y por qué estaba alucinando con él? ¿Sería demasiado tarde…o tendría remedio mi locura? Estas y otras cientos de preguntas inundaban mi mente. ¿Qué demonios era todo eso? y ¿Por qué a pesar de querer dar la vuelta y salir corriendo mis piernas se mantenían fijas en aquel lugar?

Quería echarme a correr y salir de esa casa a como de lugar, pero por más que me ordenase a mi mismo el mover las piernas y retroceder… Me era imposible, era mi cuerpo, pero no tenía ningún tipo de control sobre el, temblores se hicieron presentes en mis brazos al intentar darme la vuelta… Era como si algo o alguien estuviese sosteniéndome e inmovilizándome y de esa forma impidiéndome salir por aquella puerta.

- JaeJoong… ¿Te sucede algo? – Changmin quien ya se encontraba al fondo del pasillo y frente a la puerta de uno de los cuartos me observaba fijamente y un tanto preocupado.

- No es nada no te preocupes… - Aquello… Aquello era imposible, esa era mi voz… Mi boca se movía y mis palabras eran pronunciadas… Pero no por mí… Alguien más, alguien más las decía. – Creo que estoy un poco cansado… ¿Te molestaría si me acuesto?... La verdad no me siento muy bien. – Entonces esas piernas que se negaban a dar un paso hacia atrás ahora se movían una después de la otra, avanzando cada vez más y más hacia aquel cuarto.

Algo… Algo se había apoderado de mi cuerpo y lo utilizaba a su antojo, peor aún, yo me encontraba ahí dentro, presenciando con incredulidad como éste se movía, podía sentirlo todo, hasta el más mínimo de los movimientos… Podía oírlo y verlo todo… Pero no era más que un espectador, mi voluntad y mi conciencia se encontraban prisioneras en algún lugar de mi mente.

- Claro, es mejor que descanses. – Changmin abrió la puerta y se hizo a un lado. – Espero sea de tu agrado… Ah, espera traigo tu maleta. – Se dirigía nuevamente a la sala dejándome completamente solo con aquello, con esa cosa que me obligaba a permanecer como un simple testigo de lo que ocurría.

“¡No!, ¡no te vayas!” Gritaba mi conciencia mientras veía que se alejaba y a pesar de saber que regresaría, el miedo de tener que enfrentar a lo que fuese que se encontrase dentro de mí me obligaba a tratar de pedir ayuda.

“- Tranquilo… No te haré daño. -” La voz del joven de la fotografía hizo eco en mi mente justo ahí donde sólo podía escuchar mis pensamientos. “- No puedo dejar que te vayas, aún no…-” Antes de que pudiese seguir hablando mis piernas recobraron el movimiento y ya me encontraba dentro de la habitación, Changmin dejaba el bolso sobre una repisa del cuarto mientras me sonreía con preocupación.

- ¿Seguro qué estás bien… quieres que me quede contigo? – Se acercó y acarició mi mejilla con delicadeza.

Sentí su calidez y su preocupación a través de ese gesto y por un segundo me hizo olvidar todo lo que estaba sucediendo, no fue hasta que percibí los sentimientos de otra persona dentro de mí que comencé a sentir como aquel pánico me embriagaba nuevamente.

Nostalgia, tristeza, alegría, esperanza, anhelo… Tantos sentimientos diferentes enfrascados en una misma entidad y todos se albergaban en mi pecho… Era como si compartiese parte de mi corazón con alguien más, dejándole un espacio en él, dejándole vivir y sentir dentro de mí.

Quise llorar, correr, gritar… Gritarle a Changmin que aquél no era yo sino alguien más, la frustración crecía con cada segundo que pasaba y minuto a minuto me resignaba a vivir así por el resto de mis días… Sin poder hacer nada al respecto.

- No es necesario Changmin… Vete a dormir y… Muchas gracias por todo. – Sonreí… Sonreí cuando lo que quería era estallar en un llanto lleno de histeria.

- Está bien, descansa… - Dijo en el más dulce de los tonos mientras sujetaba mi rostro entre sus manos y depositaba un beso lleno de ternura sobre mis labios.

A pesar de todo el miedo y el pánico que sentía parte de mi corazón… Parte de mí anhelaba sus labios con locura, el volver a probarlos y volver a sentir su sabor.

“¡¡YA BASTA!!” Gritó mi conciencia en ese momento, aquello era demasiado… Era casi como una tortura ya que a pesar de sentir sus labios, sabía perfectamente que algo o alguien más lo estaba disfrutando, era como si estuviese viendo a la distancia aquel beso sin ser partícipe en ningún momento. “¡¡DÉJAME EN PAZ!!” Le ordenaba a cualquiera fuese la fuerza que se encontraba ocupando mi cuerpo.

“- Sólo… Sólo un poco más.-” Fue la respuesta que hizo eco dentro de mí, entonces mis brazos rodearon su cuello y mis labios se abrieron paso para poder disfrutar completamente de la sensación sobrecogedora que transmitían sus besos.

Un amor tan grande… Tan inmenso provenía de aquella presencia, un profundo dolor y tristeza emanaban al mismo tiempo… Dejé de luchar mientras poco a poco el miedo se desvanecía, lo que sea que estuviese sucediendo, ése algo o alguien que me obligaba a ir en contra de mi voluntad… Estaba sufriendo tanto o más que yo.

- Descansa… Nos… Nos vemos mañana. – Susurró al fin Min al separar sus labios de los míos, terminó por salir de la habitación, observándome como si supiese que algo andaba mal pero sin atreverse a decirlo.

En aquel mismo instante sentí como volvía a tener control de mi mismo, apreté las manos, moví las piernas… Mi cuerpo volvía a obedecerme. Aún podía sentirle ahí, no en mi cuerpo sino que aún dentro de aquella habitación, no corrí, no grité ni estallé en un llanto desesperado ya que comprendí que huir no serviría de nada… Él me seguiría a cualquier lugar.

- ¿Quién eres y qué quieres? – Pronuncié en un hilo de voz, respiraba con dificultad sintiéndome agotado.

“- Ya sabes quien soy… Sólo tienes que aceptarlo.-” Su voz era lejana, no se encontraba en mi cabeza, podía oírle a mis espaldas… Pero no deseaba voltearme, no quería comprobar lo que temía... Aquello que sospeché apenas vi su retrato y me enteré de su muerte.

- Estoy completamente loco. – Dije mientras una sonrisa se apoderaba de mis labios.

“- No… No lo estás, sólo no te atreves a enfrentar la realidad. -” Su voz se oía apagada y carecía de sentimientos.

- ¡Cállate! – Murmuré intentando no alertar a Changmin.

“– Sabes perfectamente quien soy y como estamos relacionados. -” Su arrogancia me provocaba asco, no deseaba oírlo… Sólo no quería volver a verlo ni sentir su presencia. “- Tienes que admitir que esto es real… Que yo soy real… Sólo así… Sólo así todo esto valdrá la pena. -” De pronto aquella voz tan fría se inundó con el suave manto de la súplica.

No podía más… Todo daba vueltas, caminé hasta dejar caer mi cuerpo sobre aquella cama, cerré los ojos, todo aquello era demasiado, realmente demasiado, mucho más de lo que cualquier persona pudiese resistir jamás. Me negaba a aceptar mis conjeturas, no quería creer lo cruel que puede llegar a ser el destino… Era tan iluso.

- Eres Yunho y tengo tu corazón… Lo sé. – Susurré mientras una lágrima recorría mi mejilla, aceptando la dura realidad y dejándome llevar por la embriagadora tentación del sueño, deseando que fuese un sueño eterno.

Aquella noche ni mis sueños dieron signos de tregua, imágenes que no tenían sentido en mi existencia aparecían una tras otra, recuerdos de una infancia que no era la mía, el abrazo de unos padres que jamás conocí, la sensación de un primer beso y una primera vez que jamás tuve… Trozos de sus recuerdos, memorias de una vida que ya se había extinguido, rastros de un amor que no pudo ser… Lo que más dolía, un mundo de recuerdos de él… De Changmin… Entonces pude comprender por fin que el corazón que latía dentro de mi pecho había pertenecido al hombre que amó y que siempre amaría a Changmin, al mismo hombre que Changmin amó con toda su alma.

Era cruel verlo en sus recuerdos, ver al chico del cual me había enamorado sintiéndose completamente feliz al lado de otra persona… Y no a mí lado.

A la mañana siguiente me desperté al oír una melodía… Distinguí el sonido de un piano, era una melodía hermosa, jamás la había oído pero se me hacía familiar. Ya no sentía la presencia de Yunho… Dejando de lado todo lo sucedido la noche anterior me puse de pie y por instinto busqué el origen de aquel hermoso sonido, quería olvidarlo todo y sólo concentrarme en estar a su lado. En la sala se encontraba Changmin completamente absorto en el piano mientras sus dedos se movían ágilmente sobre las teclas.

- Beethoven, Sonata a la luz de la luna. – Dije al notar que se detenía para brindarme una sonrisa.

- ¿La conoces?... Es mi favorita. – En menos de un par de segundos se encontraba frente a mí.

- …Sí, la conozco. – “No la conozco… Él la conoce”, pensé al suponer lo que sucedía. - ¿No tienes que ir a la Universidad o algo? – Sonreí mientras nacía en mi el deseo latente de salir corriendo, pero no era la solución y para ser sincero no era lo que en realidad deseaba.

- No… La verdad es que perdí un semestre y ahora me preparo para recuperarlo, pero bueno, ¿te preparo el desayuno? – Sujetó mi mano mientras me llevaba hasta la cocina.

La cocina era tan grande como la sala en sí, era de estilo americano y se encontraba perfectamente organizada armonizando el tono de sus colores negro y blanco a la perfección, ni siquiera una sola taza se encontraba fuera de su lugar.

- Trataré de preparar algo… La verdad es que no soy muy bueno cocinando. – Dejó mi mano en libertad y se dirigió al refrigerador, sacando del mismo varios ingredientes, huevos, leche, esencia de vainilla y un par de cosas más de las alacenas.

- ¿Harás panqueques? – Pregunté al ver los ingredientes sobre la mesa ya que me sabía la receta de memoria.

- Sí… ¿No te gustan?, es lo único que él me enseñ… - Desvió la mirada mientras los rasgos de un sufrimiento reciente se hacían presente en su rostro. - Es lo único que sé preparar. – Terminó de decir mientras partía los huevos.

Comprendí al instante lo que quería decir y sentí en parte su dolor.

- Lo estás haciendo mal. – Dije acercándome y tratando de distraerle. – En la clara hay cáscaras ¿ves? – Acorté por completo la distancia que nos separaba y sostuve el bol entre mis manos mientras lo dejaba a un lado. - ¿Te ayudo? – Sólo recibí una sonrisa como respuesta y me apoderé de aquella cocina.

Preparé los panqueques por mi cuenta mientras Changmin me observaba desde su asiento, su mirada constante me mataba de los nervios, sentirlo así tan cerca y a la vez tan lejos era un martirio… Necesitaba besarlo, sentir su piel, su calor… Necesitaba que me hiciera sentir que era yo quien le importaba, a quien quería y no a los rastros de su antiguo amor que aún vivían dentro de mí.

Nos sentamos a comer en el mismo mesón de la cocina, uno al lado del otro cuando ya estaba todo listo, disfrutando de un delicioso plato de panqueques con caramelo y crema.

- ¡Vaya!... Cocinas muy bien. – Comentó al probar un bocado del plato.

- No es para tanto… Al vivir solo te acostumbras a cocinar. – Sonreí y traté de ocultar el sonrojo que se hizo presente sobre mis mejillas mientras comenzaba a comer.

- Mis padres murieron hace tiempo y aún así jamás aprendí a cocinar bien. - Seguía comiendo, se notaba que en verdad disfrutaba.

- De seguro alguien te cocinaba… - Me mordí la lengua al notar lo que había dicho.

Pero no pude oír respuesta alguna, me atreví a mirarle y me encontré de frente con su rostro a tan sólo unos centímetros de distancia… Se veía tan apetecible, mordí mi labio al intentar contener los impulsos que me ordenaban a gritos disfrutar de aquellos labios tentadores, ya era demasiado tarde… Aquel corazón latía con fuerzas y me pregunté por un segundo si aquellos eran mis sentimientos o los de Yunho… De cualquier forma si Changmin daba el primer paso, nada podría detenerme.

- Tienes un poco de… - Atrapó mi labio superior entre los suyos recorriendo parte de ellos con la punta de su lengua, logrando despertar todos mis sentidos. – Caramelo. – Se alejó a penas un poco para brindarme una sonrisa, invitándome a entrar en su juego.

Suspiré y traté de acompasar el ritmo de mi respiración descarriada, el calor que se acumulaba en mi interior parecía emanar a través de los poros de mi piel mientras comenzaba a sentir tensión en mi vientre… ¿Tan poco necesitaba para excitarme de esa manera? Lo único que deseaba era sentir sus suaves manos al recorrer cada centímetro de mi cuerpo, para olvidarlo todo y a todos… Para dejar de pensar en la realidad tan irreal que me tocaba enfrentar… Necesitaba de él para sentirme cuerdo, para olvidar que aquél corazón que latía dentro de mí no era en realidad mío, para encontrarle una razón a la prolongación de mi vida… En simples palabras lo deseaba con todo mi ser.

- JaeJoong yo… - Parecía avergonzado de sus impulsos, me miraba como si intentase pedir mi aprobación.

Me puse de pie sosteniendo sus manos y obligándole a seguir mis pasos, sujeté sus caderas apegándolas a las mías, dejándole sentir mi deseo, dándole a entender que podía seguir sus instintos.

Lo siguiente que sentí fue el ataque de sus labios desesperados, me deseaba y necesitaba tanto o más que yo a él, el sabor de su boca era tan dulce, me deleité al dejarme llevar por su lengua, sintiéndola dentro de mi boca… Me derretía el hecho de sentirlo dentro de mí de cualquier manera, la presión en mi vientre acrecentaba cada vez más. Rodeé su cuello con mis brazos mientras él me levantaba dejándome recostado sobre el mesón de la cocina, separando mis piernas para ganarse entre ellas y apoyar parte de su cuerpo sobre mí. Le sentí, sentí la calidez de su zona baja contra mí y me estremecí por completo, una sensación desconocida inundó por completo mi interior… Quería… Deseaba ser suyo por completo.

Mordí con fuerzas su labio al sentir como empezaba a acariciar mi miembro por sobre el pantalón… ¿Qué era todo eso? Tanto deseo por una persona ¿era posible? El calor que me transmitía su cuerpo era intoxicante y el sabor de sus besos adictivo… Pero lo eran aún mas sus caderas que comenzaron a moverse, dejándome disfrutar un poco del éxtasis que tanto necesitaba.

- ¿Qué…. qué se supone que es esto? – Una voz familiar interrumpía nuestro desenfreno, era Junsu.

Changmin se detuvo al instante mirando con sorpresa en dirección a la puerta de la cocina. Lleno de vergüenza apoyé mi rostro contra su pecho, abrazándome a él sin dejarlo ir.

“- Cuidado… Ten cuidado -” La voz y la presencia de Yunho aparecieron nuevamente en cuanto oí a Junsu, advirtiéndome de su llegada… Tratando de indicarme un peligro inminente, devolviéndome a la realidad y haciéndome sentir nuevamente todo aquel pesar.

Pero ¿Cuidado de qué?... Con tan solo oír su advertencia todos mis sentidos se pusieron alerta, sentí el peligro que me quería transmitir en su mensaje, pero ¿Por qué debía sentirme así? No entendía nada en ese momento… Aquel chico que en un principio me pareció tan sincero y bueno….

¿Por qué debía temerle a… Junsu?



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11 Comentarios:

  1. brisia4/29/2010

    grasias, me encanta espaerare el siguiente capi
    me gusta el misterio

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  2. ah dios mio no lo dejes asi

    como pudiste Junsu porque eres tan metiche

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  3. ay ... todas ustedes son tan talentosas ...
    me encantan la historia, la trama y tu grandiosa forma de escribir!!

    sufro mucho esperando ... por favor no te demores en poner el próx capítulo!

    graciaaaaaaaas!

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  4. minnie4/30/2010

    aaaaaaaaaah!!!
    AMO el fic...neta...neta!

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  5. Anónimo5/01/2010

    ahhh...junsu porque apareciste...entrometido
    jajajjaa...amo tu fic...pleaseee..continualo...pronto

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  6. junssssssuuuuuuu!!!
    eres hermosooo!! pero en ese momento no eras necesario, aassshhh..
    ke divertido!!
    ya kiero leer mas!!

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  7. andreaavcdbsk5/05/2010

    haaaaaaaaaaaaaaa¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡ por dios esta buenisimo porfavor continualo pronto lo esperamos con ansias ueno gracias

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  8. youngsshii5/16/2010

    me encanta, aunke me hiciste llorar kon la situacion de mi lindo jae T.T odio ke se sienta solo T.T
    junsu malvado? jajaja ke bueno! es demasiado majo para ser cierto, no? xD
    espero la konti pronto!
    PD: aunke he de rekonocer ke me engañaste por completo, al principio kreia ke era junsu el ke le habia dado el korazon...

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  9. Anónimo5/24/2010

    salcale a su micky a junsu y dejara ya empaz a mi jaemin continuales plisss

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  10. MaUmii6/08/2010

    Plis as ya la siguiente parte m e qdado con unas ganas trmndas x el q yunho le adviert a jae q tnga cuidado d baby d junsu xq xq xq aii q tmrl a el plisss iia kiero sabrlo

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  11. Anónimo6/30/2010

    POR FAVOR COMO ME DEJAN ASI!!
    tienes que seguirlaaa!
    tengo muchas dudas!!
    Xq Junsu es malo?
    cuando Yunho dejara el cuerpo de Jae?
    Min es millonario???
    Onde esta Yoochun??

    siguela pleaseee!
    ^^

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